Kiko y Fidel

Fue Fernando Rojas, en ese entonces Director de “El Caimán Barbudo” un periódico muy importante de corte cultural en la Habana, quien me llamó un día para una “misión histórica”: hacer una caricatura de Fidel para la portada del diario.

Fidel es Dios! Nunca profanaras su imagen. Una caricatura de Fidel es algo trascendental, nadie lo ha hecho (en Cuba). Toda la imagen que se divulga de Fidel es venerándolo, idolatrándolo, es como ver esos altares de santos llenos de flores, obsequios y prendas, y todo es absolutamente calculado y aprobado, cada palabra que se pone en un diario, cada imagen, fotografía, dibujo, textura del papel es revisada por agentes del gobierno que deciden que debe ponerse y que no debe ponerse, si descubren algo, si solamente se imaginan algo que se pueda interpretar con otro sentido que no sea el único y lineal sentido de adulación e idolatría a “Dios” estas frito.

Fui a la oficina de Fernando Rojas y el resumen de lo que recuerdo que me dijo fue algo así:
— He visto tu trabajo, me parece muy interesante. Te tengo un reto… hacer una caricatura de Fidel para la portada del próximo Caimán Barbudo. Tú tienes idea de lo que esto significa, si lo haces bien es la gloria para ti, harás algo histórico, algo que nadie ha logrado hacer, será sonado, creará polémica...

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